La Humanidad de Cristo

TEXTO: Hebreos 2:14-15


INTRO: La lección del domingo pasado se trató de la Deidad de Jesucristo. Aprendimos que Él es Dios. Ahora vamos a estudiar su humanidad. Cristo tiene dos naturalezas perfectas, la divina y la humana. No es la mitad hombre y la mitad Dios (como una persona que tiene sangre de dos razas), pero en él se manifiesta la naturaleza divina completa y la naturaleza humana perfecta.


I. Tuvo un nacimiento humano.


A. Su nacimiento fue un milagro porque nació de una virgen. (Mat. 1:23)


B. Pero nació de una mujer y así se sujetó a todas las limitaciones de un cuerpo humano y de una vida humana (Gálatas 4:4).


II. Tiene nombres humanos.

A. Jesús. (Mateo 1:21)

B. El hijo de hombre. (Lucas 19:10)

C. Jesús de Nazaret. (Hechos 2:22)

D. El carpintero. (Marcos 6:3)

III. Limitaciones físicas e intelectuales.

A. Crecía. (Lucas 2:40 y 52) Hemos estudiado que es todopoderoso y que sabe todo. ¿Cómo es posible que pudo crecer en estatura y sabiduría? Recuerden que ahora se trata de su naturaleza humana. Para ser un verdadero hombre tenía que experimentar y practicar la vida humana. Poseía todos los atributos Divinos pero no los usó todo el tiempo. Se limitó a si mismo. Como humano creció en sabiduría porque sus padres le enseñaban y él estudiaba, y en estatura porque comía.

B. Apariencia. (Juan 4:9) La mujer samaritana pensaba que era cualquier otro judío.

C. Se cansó. (Juan 4:6)

D. Durmió. (Mateo 8:24)

E. Tuvo hambre. (Marcos 11:12)

F. Tuvo sed. (Juan 19:28)

G. Sufrió. (Lucas 22:44)

H. Murió. (Lucas 23:46)

IV. Limitaciones morales

Se sujetó a ser tentado. (Hebreos 2:18; 4:15-17) ¡Pero no pecó!

V. Limitaciones espirituales

A. Oraba. (Marcos 1:35) Dependía de la oración para el poder de seguir adelante.

B. Dependía del poder del Espíritu Santo para hacer la obra de Dios. (Hechos 10:38)

C. Tenía una relación humana con Dios el padre. (Marcos 15:34). Lo llamó "Dios mio".

VI. La humillación voluntaria del Hijo de Dios.

(Filipenses 2:5-8) La única manera de ser igual a Dios es ser Dios. Cuando Cristo se despojó a si mismo, no se despojó de ser Dios, sino de la forma de Dios, o sea la gloriosa manifestación como Dios. Siendo omnipotente tuvo el poder de no usar o no manifestar sus atributos Divinos, aunque siempre los tenía. Entonces pudo manifestarse como verdadero hombre.

VII. El propósito de la encarnación del Hijo de Dios.

Fue principalmente para poder sacrificarse a si mismo por nuestros pecados. (Hebreos 9:26; Hebreos 2:14-15).

Conclusión: Después de estudiar esta lección, podemos ver la magnitud del sacrificio que hizo Cristo a favor nuestro. ¿Lo ha recibido como su Salvador?

Anterior
Anterior

El Hombre más grande de la historia: Jesús

Siguiente
Siguiente

La Deidad de Jesucristo